lunes, 4 de enero de 2016

Hacer lo que sentimos IV.


Después de un largo rato, me separé un poco de ella y sequé suavemente sus lágrimas.

- Tranquila. –Susurré.-
- Gracias, en serio.
- No tenes que agradecer nada.
- De verdad que hace muchos años necesito ese abrazo.
- ¿Queres contarme por qué tanta angustia?
- Mmm…
- No te creo que ese llanto sea solo por tu trabajo.
- No…
- ¿Queres un poco de agua? –Asintió.- Ahora te traigo.

Me puse de pie y la tomé por las mejillas para besar dulcemente se frente. Me fui a la cocina, en donde le serví un vaso de agua y se lo alcancé.

- Gracias. –Dijo dejando su vaso vacío a un costado.-
- No es nada… ¿Un poco más tranquila?
- Creo.
- ¿Queres contarme?
- No tenes por qué bancarte esto.
- Si te pregunto… Es porque quiero saber.
- Es remover mucha mierda.
- Capaz te haga bien sacarlo afuera. –Dije acariciando su espalda.-
- No sé… -Suspiró.- Es que estoy sola, es eso.
- ¿No tenes familia?
- No… -Secó sus lágrimas.-
- ¿Puedo saber por qué?
- Mis viejos… Fallecieron, cuando era chica. Yo tenía 15, ahora tengo 22. –Suspiró.- Mi vieja se enfermó de VIH y lo contagió a mi papá sin saberlo… Fallecieron con muy poco tiempo de diferencia. Digamos que nunca fuimos una familia con plata, más bien todo lo contrario. Vivíamos en un barrio muy carenciado, y ahí de esas cosas no se habla. Nunca supe como se contagió mi mamá, pero creemos que fue en un hospital. –Hizo una pausa.- Más familia nunca tuve, cuando mi grupo de amigos se enteró de la enfermedad de mis viejos se alejó, así, de un día para el otro.

Yo tomé su mano y la presioné, porque no podía seguir hablando.

- Tranquila… -Dije acariciando su cuello.-
- Perdón.
- No tenes que pedir perdón.
- Es que… Desde los 15 que estoy sola, vagando por donde puedo. Ni siquiera pude terminar el secundario y me muero de vergüenza. Laburé de repositora en supermercados, en una verdulería, repartí volantes por la calle… Hice de todo, siempre todo en negro, más cuando era menor. Siempre cobré dos mangos. Y nada, hace unos años entré en un cabaret porque de verdad no encontré otra salida y hace un tiempo, me cambiaron a este… No sé, creo que son los mismos dueños.
- ¿Y en dónde vivís?
- Alquilo un monoambiente… Y no sabes cuánto me gustaría poder cambiar mi realidad.

Yo no supe muy bien qué decir, solo volví a abrazarla.

- Tranquila, tranquila… -Susurré en su oído.-
- Gracias, en serio. –Se separó un poco de mí.- A todo el mundo le doy asco.
- A mí no, más bien todo lo contrario… Podría abrazarte todo el día.
-Sonrió.- ¿Puedo pasar al baño?
- Obvio, mira… Es esa puerta de ahí. –Dije señalando.-
- Permiso eh.
- Anda tranquila. ¿Necesitas algo?
- No, solo quiero lavarme la cara.
- Pasa, dale.

Pau sonrió y se fue.



-



Ingresé en el baño y cada vez me sorprendía más. Era demasiado brilloso todo. 


Me hice un rodete con mi pelo y lavé varias veces mi cara. Ni siquiera me detuve a mirarme en el espejo, seguramente me espantaría. Sequé mi cara y salí, para volver con Pedro.

- Creo que me voy… -Le dije.-
- No, por favor. Quedate.
- ¿Para qué?
- Quiero contarte algo.
- ¿Qué?
- ¿Te sentas?

Yo suspiré y me senté a su lado.

- Yo tampoco tengo papás… -Me dijo.- Ni familia. –Suspiró.- Yo sé que cuando entras a mi casa parece que no me falta nada, pero a pesar de que la plata claro que es necesaria, no llena los vacíos.

Bajé mi mirada y no supe muy bien qué decir.

- Cuando tenía 19 años, mis viejos fallecieron en un viaje en avión… Vivían viajando por su trabajo y bueno, ese avión explotó en el aire. –Se encogió de hombros.- Y a partir de ahí no solo que me quedé solo, sino que tuve que hacerme cargo de la empresa. Sí, presido una empresa textil con 24 años. 
- No sabía todo esto…
- No, claro que no lo sabías, no te lo conté.
- Me sorprende un poco.
- Yo también estoy muy solo, yo aparento que no porque no me gusta mostrarme vulnerable… Pero, esta es mi realidad.
- ¿Y novia no tenes?
- No. ¿Por qué te crees que vas a esos lugares?
- No sé, capaz…
- No, no tengo.
- Ah…

Y se hizo un silencio.

- ¿Puedo abrazarte yo ahora? –Le pregunté.-
- Por favor…

Sonreímos y nos abrazamos.

- ¿Por qué vas a esos lugares? –Pregunté separándome un poco de él.-
- Para no sentirme tan solo.
- ¿De verdad te hace sentir acompañado?
- Mmm… No.
- ¿Y alguna vez fuiste a un prostíbulo?
- No, nunca.
- Podes decirme la verdad eh.
-Rio.- Es la verdad.
- Bueno, te creo. –Bostecé.-
- Te estás muriendo de sueño. ¿No?
- Sí…
- ¿Y no queres dormir?
- ¿Acá?
- Sí. ¿Qué problema hay?
- No sé, me da cosa…
- Dale, quedate.
- Mmm…
- Son las seis de la mañana, no te voy a dejar ir sola.
- Pero…
- Pero nada.
-Reí.- Sos muy insistente. ¿No?
- Bastante. Podemos quedarnos acá o ir al cuarto, como prefieras.
- No sé.
- Tranquila che, no te voy a comer.
-Reí.- Me estoy dando cuenta de que no.
- Ah, menos mal. –Reímos.-

Pedro se puso de pie y me ofreció su mano. Yo la tomé y me puse de pie también.

Caminamos juntos hasta su cuarto y la verdad es que no sabía qué estaba haciendo. 

- Acostate… -Me dijo.-
- ¿Y vos?
- Acostate.

Yo lo hice, algo dudosa…

- Relajate que así no vas a descansar nada.
-Reí.- No entiendo esta situación.

Pedro pasó su mano por mi cara, haciendo que cierre mis ojos. Bajó con su mano por el costado de mi cuerpo y volvió a subir, quedándose en mi pelo. Estaba arrodillado en el suelo, frente a mí.

- Dale, relajate.
- ¿De verdad no te jode que duerma acá?
- ¿Cómo me va a joder?
- No sé…

Besó mi frente y yo sonreí.

- ¿Vos vas a dormir?
- No sé, no te preocupes por eso.
- ¿Cómo no me voy a preocupar?
-Rio.- Vos ahora preocuparte por descansar.
- Gracias, en serio.
- Nada que agradecer, en serio. -Reí.- Descansa, dale…

Y sentí sus dedos jugando con mi pelo hasta que me quedé dormida.

15 comentarios:

  1. otrooooooooooooooooooooooooooooo! miss. insistente llego a pedir otro capitulo! pls!

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  2. Que hermoso Cap
    Al final es un tierno Pepe

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  3. Ayyy como siguen! Un amor Pedro!
    Que pasados tristes tienen, ojalá puedan revertirlo! ;)

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  4. Muy buena la historia. Te digo da para novela largaaaaaaaaaa ajjaja. Gracias por subir siempre.

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  5. Amo, amo este corto... Espero el próximo capitulo!!

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  6. Lo ame ❤ re da para novela. Bue

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  7. Que lindoooooo!!!! yo creo que tendrias que hacer una novela con todos tus cortos! son re lindos!

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  8. Que capitulo duro! Historias tristes de ambos lados. juntos van a poder acompañarse y sanar un poco ese dolor interno que llevan todos los dias consigo.

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